D4. De Puente Miera a Espinaréu

 

Hola,

Después de la brillante colaboración de Teresa el día de ayer, regreso a mi reseña habitual del de hoy. 

Seguramente habrá gente que nos tilde de locos, pero fue un día francamente espectacular, no obstante todos los factores en contra: todo el camino con una lluvia constante; con el ascenso más pronunciado hasta ahora, de 942 metros; la mayor parte sobre piedra suelta; con una temperatura más bien baja, que nos hizo terminar entumidos; y en condiciones de mucho lodo, al grado de que a mí se me quedara atascada una bota en el mismo. Y sin embargo, considero que ha sido un día fantástico. Las vistas de los valles y picos asturianos, en medio de la niebla fueron simplemente grandiosos. Y el follaje de los árboles, principalmente los robles y las hayas estaban increíbles. 

El ascenso fue muy lento, por las condiciones de clima y terreno, pero valió mucho la pena por las vistas. Hoy solo caminamos 11.4kms, pero en poco más de 4 horas. Eso da una idea de la dificultad. 

Llegamos a mediodía a Espinaréu, pueblo con un toque muy especial. Las casas son principalmente hechas de piedra, muy parecida a las cántabras. Y en casi todas las ventanas y balcones, los geranios con colores muy subidos adornan las calles. Pero son los hórreos los que se llevan el espectáculo: es el pueblo de Asturias con la mayor cantidad de ellos. Algunos tan antiguos como del Siglo XVI. 

Llegamos al departamento ensopados, deseando un buen baño caliente. Y comimos como campeones: melón con jamón; ensalada de espárragos, tomate y champiñones; y chuletón a la plancha, acompañado de un crianza espectacular. 

Gran dia en todos los sentidos. 

Mando un fuerte abrazo